Tras el escándalo
suscitado por la destitución del embajador de Bolivia en Italia, Grover Terán
Gamboa, acusado de presuntos actos de corrupción y acoso sexual, el jefe de la
bancada de Convergencia Nacional (CN) en la Cámara de Diputados, Luis Felipe
Dorado, manifestó su preocupación por el “deterioro en la calidad de la
representación diplomática durante el gobierno de Evo Morales” y acotó que
“mientras el Servicio Exterior se derrumba, el canciller está distraído
hablando de la papalisa”.
“Vemos que en los últimos años han
proliferado los nombramientos de embajadores y cónsules por razones políticas,
postergando a los funcionarios de carrera, a los diplomáticos profesionales,
para promover a personas sin idoneidad, designadas sólo por su adhesión al
partido de gobierno”, indicó.
Sobre el caso de Terán Gamboa, el
parlamentario dijo que “Lo grave de estos escándalos es que manchan la imagen
internacional de Bolivia. La Cancillería le debe explicaciones al país”.
“Estamos viendo el resultado de toda una política de
desinstitucionalización del Servicio Exterior, con un canciller que se dedica a
hablar de la coca en el desayuno escolar, del sexo de las piedras y del viagra
andino, en vez de atender a sus funciones”, señaló.
