“Es la confesión de varios delitos que
se pretenden cometer, desde abuso de funciones hasta malversación de fondos
públicos”, advirtió.
Para Dorado el destinar a empleados
públicos, como son los ministros, a tareas ajenas a su cargo se comete abuso de
funciones; además, dijo, que utilizar obras y bienes del Estado para una
campaña constituye un claro caso de malversación
El parlamentario consideró que poner
todo el aparato estatal en función de un partido es una muestra del temor a no
tener el favor del voto popular, para lo que se activan los mecanismos de la
prebenda.
Sin embargo, el diputado opositor señaló
que “estas prácticas fracasaron en Beni y fracasarán a nivel nacional, siempre
que los demócratas de Bolivia sepamos unirnos en torno a un nuevo liderazgo”.
