“La siembra de sorgo y girasol se
avecina, y los productores precisan un panorama certero para ampliar la
producción de estos productos”, con esta frase expresó su preocupación el presidente
de la Cámara de Exportadores de Santa Cruz (CADEX), Ramiro Monje, quien sugirió
al gobierno, el levantamiento de las restricciones a la comercialización de
estos productos para incentivar la producción.
De acuerdo a Monje, la exportación
incide en la mejora de la situación productiva en el país, puesto al existir un
mercado más amplio, se incentiva a que se siembre más y con el apoyo a la
gestión productiva, se garantiza la seguridad alimentaria y se equilibran los
precios de forma natural en el mercado interno.
En tal perspectiva, sugirió definir un
plan de trabajo público – privado, que permita analizar la situación de cada
producto y por ende, la factibilidad de su comercialización. A su vez, afirmó
que para apoyar a estos sectores, se necesita de mejoras en el acceso a insumos
y tecnología, infraestructura para el
transporte, almacenamiento y agilización de trámites aduaneros a través
de ventanillas únicas.
Con respecto a la importancia de estos
sectores para el agro, Monje destacó que el sorgo es un cultivo que se siembra
especialmente de invierno, como rotación en los campos destinados a la soya en
verano. “El rastrojo que deja la producción del grano, es imprescindible para
mejorar los rendimientos de la cosecha de la oleaginosa en la próxima campaña”,
afirmó.
Por otra lado, señaló que desde el punto
de vista alimenticio, el sorgo es capaz de remplazar al maíz hasta en un 70%,
destinado al consumo de aves y ganado, con precios más económicos, sobre todo
en la época de cosecha entre agosto y octubre, que es la temporada de menor
provisión del producto gramíneo. Además, señaló que se tienen excelentes
oportunidades de mercado en Perú y
Chile.
Con respecto al girasol, Monje precisó
que también se trata de un cultivo de invierno resistente a la sequía, con un
alto potencial de siembra y producción. Esta oleaginosa posee un alto contenido
de aceite de muy buena calidad (de 40 a 47%), lo que origina una mejor
cotización de su precio a nivel internacional.
Monje aseguró que el consumo de girasol
en Bolivia es tan solo el 10% de la capacidad de producción que tiene el país,
por lo que se deduce que se tiene un gran excedente exportable y por tanto su
comercialización no presenta ningún efecto negativo en la seguridad
alimenticia.
Por otra parte, Monje precisó exportar
aceite con valor agregado, es más eficiente que hacerlo en grano, pues el alto
volumen con relación a su peso origina un alto costo del flete. Además, afirmó
que la industrialización amplía la capacidad para generar empleos a lo largo de
la cadena y además existen oportunidades, dado los buenos precios en los
mercados tradicionales, que desde pasados años han venido generando rentabilidad
para el país.
Con respecto a los permisos para la
exportación vigentes a la fecha, el presidente de CADEX, solicitó la celeridad
en su ejecución, evitando de esta manera caer en demoras perjudiciales que
afecten a toda la cadena productiva.
Antecedentes
- El
sorgo se encuentra prohibido de exportarse a desde el 2008, a través del D.S.
No.435. Por su parte, el aceite de girasol se puede exportar previa
autorización del gobierno, normado por el D.S. No. 29542.
- Desde
el año 2008, las exportaciones de girasol han venido soportando un
decrecimiento tanto en volumen como en valor. Los ingresos por la venta
internacional de este bien, cayeron en un 39% durante el 2011, alcanzando los
75 millones de dólares, menos de la mitad de las ventas de 2008. En volúmenes
las ventas del 2011 fueron 55% menos.
- El
sorgo soporta su cuarto año prohibido de exportarse y hasta ahora la medida no
ha logrado solucionar los problemas productivos del sector. Los productores
demandan certidumbre.
- La
semana pasada, tras largas negociaciones entre privados y gobierno, se logró
ampliar los cupos en la exportación de arroz, maíz y carne.