El cambio climático es una amenaza global latente que no atañe a un solo sector, como tampoco su solución, sino que debe ser encarado a nivel internacional por todos los actores de la sociedad civil y del sector público. Tal unión –según expertos en la materia- tiene como imperativo cambiar la forma tradicional del desarrollo en lo social y productivo, para mitigar o adaptarse al cambio climático que ha sido vertiginosamente acelerado por efectos del progreso humano. Esta conclusión fue vertida en el Foro “Innovaciones y Mecanismos para enfrentar el Cambio Climático” organizado por el Instituto Humanista para la Cooperación con los Países en Desarrollo (Hivos) y el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) que fue organizado el 26 de marzo de 2014 en la ciudad de La Paz, contando con la presencia de cerca de 200 personas, habiéndose destacado la participación de representantes de los Ministerios de Medio Ambiente y Agua, Ministerio de Desarrollo Rural, Ministerio de Minera, Ministerio de Desarrollo Productivo, Ministerio de Recursos Hídricos y Riego, Ministerio de Trabajo y Ministerio de Defensa Civil, además de la presencia de representantes diplomáticos y de la Presidenta de la Aduana Nacional de Bolivia, Marlene Ardaya, así como personalidades del sector privado y de la academia.
Clima: El Estado del Mundo
El experto costarricense, Gustavo Adolfo Solano, expositor central del foro, resumió el informe que el IPCC presentado a la CMNUCC el 2007 en Bali, Indonesia, dando cuenta que desde 1970 hasta la actualidad, las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) han aumentado 70%, mientras que los niveles de dióxido de carbono se han visto elevados en 80%. Además, se proyecta que del 2000 al 2030, de mantenerse la situación sin cambio y las políticas actuales, las emisiones de GEI crecerán entre 40 y 110%.
Estado del clima en Bolivia
Para Humberto Gómez Cérvero, Director de la Fundación Amigos de la Naturaleza (FAN), “la investigación del impacto del cambio climático es importantísima ya que urgen respuestas globales y locales a través de información”. Expresó que “en Bolivia durante los últimos 50 años la temperatura ha aumentado 0,5⁰C”, agregando que en ese lapso se ha tenido incrementos y disminuciones de precipitaciones, dando lugar a inundaciones y sequías, siendo las épocas húmedas y secas más intensas. El experto arguye que “actualmente la disponibilidad de agua es mayor a la demanda, sin embargo hay un déficit hídrico de julio a octubre y para el 2030 existirá una mayor presión hídrica, pues la oferta disminuirá en 20% y la demanda crecerá hasta 110%”. En cuanto al impacto del cambio climático en Bolivia, dijo que se espera reducciones de -13% a -38% en rendimiento de arroz en Santa Cruz; para el caso de la soya, se espera bajas del -19% a -27%. La solución según FAN pasa por el cambio en el ciclo de siembra, en el uso de semillas y una mejora integral de tecnología de producción (riego, fertilización, período de siembra).
“El futuro no es alentador”, concluyó Gómez, si no se cambian las prácticas productivas, ya que, según el Modelo Climático Regional PRECIS para Bolivia simulado a los años 2030 y 2100, se avecina un aumento de la temperatura en todo el país de 1 a 2⁰C para el año 2030, y del 5 al 6⁰C para el 2100, siendo más extremo en Altiplano y Amazonía.
Alto compromiso del Gobierno
Dependiente del Ministerio de Medio Ambiente y Aguas (MMyA), la representante de la Autoridad Plurinacional de la Madre Tierra, Mónica Montellano Ponce de León, explicó que Bolivia emite tan solo es 0,003 del total de GEI en el mundo, y pese a ello el Gobierno boliviano ha mostrado su preocupación y compromiso al pasar de un “Programa de Cambio Climático” a crear la Autoridad Plurinacional de la Madre Tierra, como una entidad especializada para tratar la temática en la búsqueda de soluciones.
Para Montellano, la segunda expositora del Foro, el énfasis del Gobierno está en los “mecanismos de adaptación”, citando como ejemplo el impacto en la disponibilidad de agua por efecto del derretimiento de los glaciares que afecta a las economías familiares del Norte de La Paz, dando cuenta que la retracción de los glaciares es de un 40% y que la pérdida de nevados es irreversible. Agregó que existen estrategias de adaptación como la “cosecha de agua”; retenes (atajados); canales de riego; mejora de infraestructura, capacitación por mejores técnicas agropecuarias que consuman menos recursos. Informó que cuentan con otros Programas como el de la “Amazonia sin fuego”; “Monitoreo del Retrocesos de Glaciares en los Andes Tropicales”, “Conservación de la biodiversidad a través de actores locales”, y el “Proyecto de la Tercera Comunicación Nacional” (que trata de un inventario según fuentes de producción de gases, dando cuenta que la actividad agropecuaria, forestal, energética e industrial son sectores a atender, siendo que se diagnosticó que el cambio de uso de tierras e incendios forestales son la mayores fuentes de emisión de GEI, mientras que en las ciudades la principal es el sector de transporte).
“Forma tradicional de desarrollo debe cambiar”
El “business as ususal” que ha llevado al crecimiento económico mundial, ha logrado que los indicadores económicos sean positivos, particularmente en los países sudamericanos; sin embargo, “la factura ambiental no se ha cobrado”. La pérdida de biodiversidad, el cambio en la temperatura, el aumentos de Gases de Efecto Invernadero (GEI) emitidos y la degradación de los suelos -en otros- son realidades probadas” indicó Corina Straatsma, Directora de la Oficina de Hivos Regional Sudamérica, al sentenciar que “la forma tradicional de apoyo al desarrollo debe cambiar y ajustarse ante esta realidad”.
Un camino que sugiere Straatsma, bajo la bandera de la mitigación y adaptación al cambio climático, es valerse de los instrumentos financieros y mecanismos a nivel internacional como nacional (REDD+; REDD++, NAMA, NAPA, Mecanismo Conjunto de Mitigación y Adaptación al CC) que existen, y adaptarlos a la realidad de Bolivia.
Necesaria sinergia Gobierno-Privados-Academia
“Pese a que algunos lo quieran negar o duden de ello, el cambio climático es una realidad que impacta sobre la seguridad y soberanía alimentaria, en lo que hace a las esferas de producción y distribución”, dijo José Luis Landivar Bowles, Presidente del IBCE, añadiendo que “existe la necesidad de un trabajo conjunto entre el sector público, privado y académico para evaluar y monitorear tal fenómeno, y diseñar políticas que permitan medir su impacto sobre la agricultura, la seguridad alimentaria y la distribución de alimentos, hasta las de administración de los recursos naturales debiéndose contar para ello con Sistemas Sustentables de Producción de “agro alimentos”; políticas para un mejor acceso a los mercados locales y externos que signifiquen incentivos a la inversión, re-inversión y adaptación de sistemas de producción. Todas estas políticas resultan esenciales para estar mejor preparados ante eventuales impactos que se puedan dar, producto del cambio climático” insistió Landivar.
Principales expresiones y conclusiones del foro
Entre las principales consideraciones y expresiones que fueron destacadas por el Moderador del Foro, Emb. Marcelo Pérez Monasterios, cuentan las siguientes:
· La información general y particular en cuanto a Bolivia sobre la problemática del cambio climático debe ser confiable para una mejor toma de decisiones
· Existe una deuda histórica de un grupo de países desarrollados para con un grupo de países en vías de desarrollo
· El Gobierno y el sector privado deben difundir de forma permanente información para que la sociedad civil pueda tomar decisiones adecuadas sobre la materia
· Una preocupación recurrentemente manifestada fue la disminución de la disponibilidad de agua en Bolivia de no cambiar la situación actual
· Los participantes coincidieron en la pertinencia de la realización del Foro, por ser el cambio climático un fenómeno que atañe absolutamente a todos
· Se instó a dar seguimiento a las acciones que se puedan tomar en función de las amenazas que supone el cambio de clima en Bolivia
· Se insistió en la importancia de un trabajo conjunto entre las instancias del Gobierno (nacional, departamental y municipal) con entidades del sector productivo privado y académico
· Pese a que algunos ponen en duda la existencia del cambio climático, el ser humano con su accionar está precipitando el fenómeno del calentamiento global
· El derretimiento de los glaciares, las inundaciones y sequías en el país, preocupan como consecuencia del cambio climático global
· Consciente de la gravedad de la amenaza, el Gobierno ha creado la Autoridad Plurinacional de la Madre Tierra, para ocuparse del tema con responsabilidad
· De no tomarse medidas de mitigación suficientes, el cambio climático podrá afectar la seguridad y la soberanía alimentaria. Para impedir aquello, hay que apostar por producir mucho más de nuestras necesidades e implementar cambios en la forma tradicional de producción, con mejor tecnología, rotación de cultivos, siembra directa, mejores semillas, entre otras medidas.
El Foro
La cuadragésima novena versión del Foro Permanente de Diálogo con la Sociedad Civil sobre Producción, Comercio Exterior e Integración, titulado “Innovaciones y mecanismos para enfrentar el Cambio Climático” fue coorganizado por HIVOS e IBCE, con el respaldo de FAN, la Autoridad Plurinacional de la Madre Tierra y el Ministerio de Medio Ambiente y Agua (MMAyA).
Clima: El Estado del Mundo
El experto costarricense, Gustavo Adolfo Solano, expositor central del foro, resumió el informe que el IPCC presentado a la CMNUCC el 2007 en Bali, Indonesia, dando cuenta que desde 1970 hasta la actualidad, las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) han aumentado 70%, mientras que los niveles de dióxido de carbono se han visto elevados en 80%. Además, se proyecta que del 2000 al 2030, de mantenerse la situación sin cambio y las políticas actuales, las emisiones de GEI crecerán entre 40 y 110%.
Estado del clima en Bolivia
Para Humberto Gómez Cérvero, Director de la Fundación Amigos de la Naturaleza (FAN), “la investigación del impacto del cambio climático es importantísima ya que urgen respuestas globales y locales a través de información”. Expresó que “en Bolivia durante los últimos 50 años la temperatura ha aumentado 0,5⁰C”, agregando que en ese lapso se ha tenido incrementos y disminuciones de precipitaciones, dando lugar a inundaciones y sequías, siendo las épocas húmedas y secas más intensas. El experto arguye que “actualmente la disponibilidad de agua es mayor a la demanda, sin embargo hay un déficit hídrico de julio a octubre y para el 2030 existirá una mayor presión hídrica, pues la oferta disminuirá en 20% y la demanda crecerá hasta 110%”. En cuanto al impacto del cambio climático en Bolivia, dijo que se espera reducciones de -13% a -38% en rendimiento de arroz en Santa Cruz; para el caso de la soya, se espera bajas del -19% a -27%. La solución según FAN pasa por el cambio en el ciclo de siembra, en el uso de semillas y una mejora integral de tecnología de producción (riego, fertilización, período de siembra).
“El futuro no es alentador”, concluyó Gómez, si no se cambian las prácticas productivas, ya que, según el Modelo Climático Regional PRECIS para Bolivia simulado a los años 2030 y 2100, se avecina un aumento de la temperatura en todo el país de 1 a 2⁰C para el año 2030, y del 5 al 6⁰C para el 2100, siendo más extremo en Altiplano y Amazonía.
Alto compromiso del Gobierno
Dependiente del Ministerio de Medio Ambiente y Aguas (MMyA), la representante de la Autoridad Plurinacional de la Madre Tierra, Mónica Montellano Ponce de León, explicó que Bolivia emite tan solo es 0,003 del total de GEI en el mundo, y pese a ello el Gobierno boliviano ha mostrado su preocupación y compromiso al pasar de un “Programa de Cambio Climático” a crear la Autoridad Plurinacional de la Madre Tierra, como una entidad especializada para tratar la temática en la búsqueda de soluciones.
Para Montellano, la segunda expositora del Foro, el énfasis del Gobierno está en los “mecanismos de adaptación”, citando como ejemplo el impacto en la disponibilidad de agua por efecto del derretimiento de los glaciares que afecta a las economías familiares del Norte de La Paz, dando cuenta que la retracción de los glaciares es de un 40% y que la pérdida de nevados es irreversible. Agregó que existen estrategias de adaptación como la “cosecha de agua”; retenes (atajados); canales de riego; mejora de infraestructura, capacitación por mejores técnicas agropecuarias que consuman menos recursos. Informó que cuentan con otros Programas como el de la “Amazonia sin fuego”; “Monitoreo del Retrocesos de Glaciares en los Andes Tropicales”, “Conservación de la biodiversidad a través de actores locales”, y el “Proyecto de la Tercera Comunicación Nacional” (que trata de un inventario según fuentes de producción de gases, dando cuenta que la actividad agropecuaria, forestal, energética e industrial son sectores a atender, siendo que se diagnosticó que el cambio de uso de tierras e incendios forestales son la mayores fuentes de emisión de GEI, mientras que en las ciudades la principal es el sector de transporte).
“Forma tradicional de desarrollo debe cambiar”
El “business as ususal” que ha llevado al crecimiento económico mundial, ha logrado que los indicadores económicos sean positivos, particularmente en los países sudamericanos; sin embargo, “la factura ambiental no se ha cobrado”. La pérdida de biodiversidad, el cambio en la temperatura, el aumentos de Gases de Efecto Invernadero (GEI) emitidos y la degradación de los suelos -en otros- son realidades probadas” indicó Corina Straatsma, Directora de la Oficina de Hivos Regional Sudamérica, al sentenciar que “la forma tradicional de apoyo al desarrollo debe cambiar y ajustarse ante esta realidad”.
Un camino que sugiere Straatsma, bajo la bandera de la mitigación y adaptación al cambio climático, es valerse de los instrumentos financieros y mecanismos a nivel internacional como nacional (REDD+; REDD++, NAMA, NAPA, Mecanismo Conjunto de Mitigación y Adaptación al CC) que existen, y adaptarlos a la realidad de Bolivia.
Necesaria sinergia Gobierno-Privados-Academia
“Pese a que algunos lo quieran negar o duden de ello, el cambio climático es una realidad que impacta sobre la seguridad y soberanía alimentaria, en lo que hace a las esferas de producción y distribución”, dijo José Luis Landivar Bowles, Presidente del IBCE, añadiendo que “existe la necesidad de un trabajo conjunto entre el sector público, privado y académico para evaluar y monitorear tal fenómeno, y diseñar políticas que permitan medir su impacto sobre la agricultura, la seguridad alimentaria y la distribución de alimentos, hasta las de administración de los recursos naturales debiéndose contar para ello con Sistemas Sustentables de Producción de “agro alimentos”; políticas para un mejor acceso a los mercados locales y externos que signifiquen incentivos a la inversión, re-inversión y adaptación de sistemas de producción. Todas estas políticas resultan esenciales para estar mejor preparados ante eventuales impactos que se puedan dar, producto del cambio climático” insistió Landivar.
Principales expresiones y conclusiones del foro
Entre las principales consideraciones y expresiones que fueron destacadas por el Moderador del Foro, Emb. Marcelo Pérez Monasterios, cuentan las siguientes:
· La información general y particular en cuanto a Bolivia sobre la problemática del cambio climático debe ser confiable para una mejor toma de decisiones
· Existe una deuda histórica de un grupo de países desarrollados para con un grupo de países en vías de desarrollo
· El Gobierno y el sector privado deben difundir de forma permanente información para que la sociedad civil pueda tomar decisiones adecuadas sobre la materia
· Una preocupación recurrentemente manifestada fue la disminución de la disponibilidad de agua en Bolivia de no cambiar la situación actual
· Los participantes coincidieron en la pertinencia de la realización del Foro, por ser el cambio climático un fenómeno que atañe absolutamente a todos
· Se instó a dar seguimiento a las acciones que se puedan tomar en función de las amenazas que supone el cambio de clima en Bolivia
· Se insistió en la importancia de un trabajo conjunto entre las instancias del Gobierno (nacional, departamental y municipal) con entidades del sector productivo privado y académico
· Pese a que algunos ponen en duda la existencia del cambio climático, el ser humano con su accionar está precipitando el fenómeno del calentamiento global
· El derretimiento de los glaciares, las inundaciones y sequías en el país, preocupan como consecuencia del cambio climático global
· Consciente de la gravedad de la amenaza, el Gobierno ha creado la Autoridad Plurinacional de la Madre Tierra, para ocuparse del tema con responsabilidad
· De no tomarse medidas de mitigación suficientes, el cambio climático podrá afectar la seguridad y la soberanía alimentaria. Para impedir aquello, hay que apostar por producir mucho más de nuestras necesidades e implementar cambios en la forma tradicional de producción, con mejor tecnología, rotación de cultivos, siembra directa, mejores semillas, entre otras medidas.
El Foro
La cuadragésima novena versión del Foro Permanente de Diálogo con la Sociedad Civil sobre Producción, Comercio Exterior e Integración, titulado “Innovaciones y mecanismos para enfrentar el Cambio Climático” fue coorganizado por HIVOS e IBCE, con el respaldo de FAN, la Autoridad Plurinacional de la Madre Tierra y el Ministerio de Medio Ambiente y Agua (MMAyA).