Para la campaña agrícola de invierno
2018, se han sembrado unas 694 mil hectáreas de los cultivos de trigo, maíz,
sorgo, girasol y chía, los cuales ya se encuentran afectados en su normal
desarrollo y en su potencial de rendimiento, debido a la sequía prolongada,
lamentó el presidente de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo
(Anapo), Richard Paz Aponte.
Sostuvo que, se estima una disminución
en la producción de 370 mil toneladas de granos, con una pérdida económica para
los productores de al menos 75 millones de dólares, que son ingresos que
dejarán de percibir por su producción.
Posteriormente dijo que la cosecha
comenzará en unos 10 días, para los cultivos de trigo, maíz y sorgo, los
cuales, están afectados por la sequía, principalmente en las zonas de Pailón,
Cuatro Cañadas, San José de Chiquitos y San Julián, donde no ha llovido desde
mayo y representan más del 70 por ciento del área total sembrada.
Estos cultivos necesitan entre 400 a 500
milímetros de agua durante todo el ciclo de su desarrollo, y en promedio, en
las zonas afectadas, llovió menos de 150 milímetros.
En la campaña de invierno se sembraron
107 mil hectáreas de trigo, 109 mil hectáreas de girasol, 106 mil hectáreas de
maíz, 360 mil hectáreas de sorgo y 12 mil hectáreas de chía. Con respecto a la
soya se tiene un avance de siembra de 40 por ciento de las 300 mil hectáreas
estimadas a sembrar hasta finales de julio.
La sequía prolongada ha favorecido el
ataque con severidad del Gusano Cogollero en maíz y sorgo, con lo cual, los agricultores
han realizado más de 5 aplicaciones de insecticidas para intentar disminuir su
afectación y pérdida de productividad.
Sostuvo que es importante avanzar en la
aprobación de semilla genéticamente mejorada, para contar con las herramientas
tecnológicas que existen para controlar estas plagas que ocasionan una
disminución en la productividad y cuantiosas pérdidas económicas a los
productores.